El consejero delegado de Santander, José Antonio Alvarez, abrió este martes la posibilidad de empezar a cobrar en cuentas inactivas de las grandes corporaciones si bajan aún más los tipos de interés. No obstante, según explicó el ejecutivo del banco durante la presentación de resultados de la entidad, esta medida está está descartada para las cuentas de clientes particulares.

«Entre bancos se cobra, a los clientes institucionales ya se les cobra y es una práctica habitual
del mercado, eso ya se viene haciendo», explicó, restando importancia a la medida. De hecho Álvarez limitó esta posibilidad a cuentas en las que las corporaciones tienen los saldos para su operativa o transacciones ordinarias, excluyendo también a aquellas otras donde alojen la tesorería. 

«En el retail no estamos pensando cobrar por las cuentas», dijo de forma tajante, incluyendo en esa decisión tanto fijar tipos negativos o generar comisiones nuevas. Las cuentas inactivas de los particulares suelen estar además al mínimo de saldo o, incluso, sin él, subrayó.

Álvarez quiso circunscribir la decisión al caso de que el Banco Central Europeo (BCE) dé otra vuelta de tuerca a los tipos. Una posibilidad que podría ser realidad, sin embargo, si decide, como vaticinan algunos analistas,bajar del -0,4% al -0,5% el cargo que repercute a la banca por custodiar su liquidez. El organismo dirigido por Mario Draghi encara precisamente este jueves una reunión de la que se esperan pistas sobre próximos movimientos después de que en junio adelantase su disponibilidad para flexibilizar aún más la política monetaria.

El consejero delegado de Santander dejó entrever que sería casi el paso lógico puesto que ya se están cobrando por los depósitos entre bancos y es una «práctica habitual» hacerlo también a los clientes institucionales en operaciones de liquidación y custodia. Santander ha hecho cálculos y un aumento en 100 puntos básicos en los tipos «impactaría en Europa como en 1.000 millones de euros o en algo más de 1.000 millones» en pérdida de ingresos o de margen de intermediación, compartió Álvarez.

Fuente: Cinco Días