Repsol obtuvo en el primer semestre de este año un beneficio neto de 1.133 millones de euros, lo que supone un retroceso del 26,7% respecto a los 1.546 millones del mismo periodo del ejercicio anterior, si bien hay que contar con que entonces se incluyó la plusvalía de 344 millones de euros proveniente de la venta de su participación en Naturgy, que era del 20%. Es decir, una vez descontadas estas plusvalías, la diferencias se reduce al 5,7%. La inclusión de las citadas plusvalías habían supuesto que el beneficio del primer semestre del año pasado creciera un 46%.
El beneficio neto ajustado, que mide específicamente el comportamiento de los negocios del grupo, fue de 1.115 millones, lo que supone un descenso de 1,5% frente a los 1.132 del año pasado. El año pasado había crecido un 12%.
Según el grupo que preside Antonio Brufau, estos resultados se pueden considerar «sólidos», ya que a su juicio se consiguieron en un contexto de precios más bajos del crudo, caída de los márgenes internacionales de refino y con la suspensión de la producción en Libia durante, prácticamente, la mitad del semestre.
Amortizar un 5% del capital
En ese sentido, el consejo de administración decidió ayer, «a la vista de la firmeza de los resultados y la capacidad de generación de caja», proponer a la próxima Junta General de Accionistas una mejora de la retribución a través de la amortización de un 5% del capital social.
Por áreas de negocio, el upstream (exploración y producción) obtuvo un resultado de 646 millones de euros, similar al del primer semestre de 2018, en un periodo en el que la compañía realizó el mayor descubrimiento en tierra registrado en 2019 e inició la producción del proyecto Buckskin, en el Golfo de México estadounidense.
Por su parte, el downstream (refino y distribución) alcanzó los 715 millones de euros, frente a los 762 millones del mismo periodo de 2018. El negocio comercial continuó impulsando su actividad innovadora e inauguró el primer punto de recarga ultra-rápida de la Península. Además, incorporó a su cartera tres proyectos renovables en desarrollo con una capacidad total de 800 MW.
Fuente: El País